Pues sí, es la del Sagrado Corazón la que dirige la mirada hacia abajo, a los posibles fieles o curiosos que se acercan a la talla. El resto dirige sus ojos a otras dimensiones. Así, el niño Jesús de la cima, que porta una cruz sobre el lado izquierdo del pecho, apoyada en su hombro, los proyecta cara lo alto, por encima de su cabeza; san Juan, el patrono, mira más allá de los tres dedos levantados de su mano derecha; y nos queda el silencioso diálogo de las miradas que se dedican el niño Jesús y san José, situados en el lado derecho, mirando el retablo de frente.
Señalando su Corazón, con las marcas de los clavos en el centro de las palmas, bien visibles, el Sagrado Corazón de Louredo mira cara ti, si le observas desde el presbiterio. Un gesto bien elocuente.
Es una devoción antigua, pero que se renueva y que recientemente ha recibido especial atención. Vamos a por una selección de textos de distintas épocas, para verla con cierta perspectiva.
- Estampa del Sagrado Corazón, conservada en O Outeiro, Louredo, traída de Bilbao o pudo llegar con la revista 'Mensajero', a la que estaba suscrita la abuela.
- Devocionario Completo Vilariño, 1946, conservado en O Outeiro, Louredo.
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- Hoja del misal en gallego
166. El viernes siguiente al segundo domingo después de Pentecostés, la Iglesia celebra la solemnidad del sagrado Corazón de Jesús. Además de la celebración litúrgica, otras muchas expresiones de piedad tienen por objeto el Corazón de Cristo. No hay duda de que la devoción al Corazón del Salvador ha sido, y sigue siendo, una de las expresiones más difundidas y amadas de la piedad eclesial.
Entendida a la luz de la sagrada Escritura, la expresión "Corazón de Cristo" designa el misterio mismo de Cristo, la totalidad de su ser, su persona considerada en el núcleo más íntimo y esencial: Hijo de Dios, sabiduría increada, caridad infinita, principio de salvación y de santificación para toda la humanidad. El "Corazón de Cristo" es Cristo, Verbo encarnado y salvador, intrínsecamente ofrecido, en el Espíritu, con amor infinito divino-humano hacia el Padre y hacia los hombres sus hermanos.
- DISCURSO DEL SANTO PADRE FRANCISCO A LOS PARTICIPANTES EN LA ASAMBLEA GENERAL DE LAS OBRAS MISIONALES PONTIFICIAS
Sala Clementina, Sábado, 3 de junio de 2023
Queridos hermanos y hermanas, esto es lo que Jesús nos ha enseñado a lo largo de su vida: su compasión por los que estaban heridos; su conmoción ante el dolor; la misericordia ungiendo a los pecadores; su inmolación por el pecado del mundo. Nos ha manifestado el corazón de Dios, como el de un Padre que siempre nos espera, nos ve desde lejos y viene a nuestro encuentro con los brazos abiertos; un Padre que no rechaza a nadie, sino que acoge a todos; que no excluye a ninguno, sino que llama a todos. Me gustó una obra juvenil de estilo pop sobre la parábola del hijo pródigo. En un momento del espectáculo, el hijo pródigo le cuenta a un amigo que extraña a su papá. “Quisiera regresar, porque extraño a papá, pero no puedo, seguramente papá no me va a aceptar”. Y el amigo le dice: “Escríbele una carta y dile que tu voluntad es volver a casa, pídele perdón y dile que, si él quiere recibirte, tome un pañuelo blanco y lo ponga en la ventana de la casa”. El espectáculo continúa y al final, cuando el hijo ya está llegando a casa, se ve que está llena de pañuelos blancos. Esto nos dice que el amor, el perdón de Dios no tiene medida, no tiene medida. Debemos ir por este camino, con esta confianza.
- Recorte de la epacta 2024
- En este 2024 está en marcha un año Jubilar en el santuario de las apariciones del Sagrado Corazón. Del comunicado que habla de este año de celebraciones, extraigo lo siguiente, aunque puedes consultarlo completo AQUÍ.
Para conmemorar el 350 aniversario de las apariciones del Corazón de Jesús a santa Margarita María en Paray-le-Monial, tendrá lugar un Jubileo de un año y medio desde el 27 de diciembre de 2023 -fecha del aniversario de la primera aparición principal- hasta el 27 de junio de 2025 -fecha de la Solemnidad del Sagrado Corazón: «Devolver amor por amor» es el lema de este gran momento de peregrinación, de celebraciones litúrgicas, de encuentros.
¿Por qué devolver amor por amor? En el siglo XVII Cristo mostró su Corazón a la Hna. Margarita María, religiosa de la orden de la Visitación, en Paray-le-Monial (Borgoña), diócesis de Autun. Las tres apariciones principales tuvieron lugar el 27 de diciembre de 1673, el primer viernes de un mes de 1674 y en junio de 1675.
La santa recibió su misión en tres etapas. Primero, Jesús le declara su amor: mi Corazón está apasionado de amor por todos los hombres y por ti en particular. Entonces, se lamenta de que su amor no sea es amado, y no reciba de la mayoría que ingratitudes e indiferencias. Estas faltas de amor le afecta sobre todo en el sacramento de la Eucaristía en particular, de parte de aquello que le están consagrados. En fin, Jesús pide en reparación una fiesta para honrar su divino Corazón. Para que cada uno acoja este amor sobreabundante, y al mismo tiempo herido, y para que todos puedan responder a su llamada, se ha convocado este Jubileo con el fin de devolver a Cristo «amor por amor». Es pues esta petición la que constituye el tema de este Jubileo de los 350 años de las Apariciones.
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